El 28 enero de 2009, a la edad de 85 años, falleció Louk Hulsman en su casa de Dordrecht (Países Bajos). En la nota enviada por su familia se le describía como un “jardinero del mundo, abierto y en permanente contacto hasta su día final, siempre esforzándose por mayor humanidad”. Hulsman fue, asimismo, literalmente, un delicado y entusiasta jardinero, aunque aparentemente la metáfora nos retrocede a las frases finales del libro Peines Perdues, en su traducción en holandés (adaptada). “Cuando quito de mi jardín los obstáculos que impiden al sol y al agua fertilizar la tierra, entonces las plantas crecerán como yo nunca hubiera supuesto. De un modo comparable, la desaparición de los sistemas estatales de justicia penal, en una sociedad más saludable y dinámica, va a allanar el camino para una nueva clase de justicia”....

hdl.handle.net/1765/30951
Erasmus School of Law

Blad, J. (2012). En memoria de Louk Hulsman. Retrieved from http://hdl.handle.net/1765/30951